domingo, 25 de noviembre de 2007

Entrega final

JEAN-PAUL SARTRE: UNA MIRADA DEL EXISTENCIALISMO A TRAVÉS DEL BUDIMO

Resumen

A continuación se exponen algunos de los principales conceptos de la filosofía existencial de Jean-Paul Sartre, al igual que la filosofía Budista. Los conceptos del existencialismo serán analizados a la luz del Budismo, con lo que se quiere demostrar como dos corrientes filosóficas que distan tanto de sí mismas, comparten muchos postulados.

Palabras Claves

Relación de conceptos, Ser en sí, Para sí, Nada, Negación, No yo, Nirvana.

El existencialismo del filósofo Francés Jean-Paul Sartre, ha sido analizado desde diferentes puntos de vista, como la ontología, la moral, el psicoanálisis, la sociología, su relación con la literatura, entre otras ramas del conocimiento. Sin embargo, es poco lo que se hablado sobra sus posibles influencias y relación con otras ramas del pensamiento. Así, esta investigación ha tratado de hondar sobre una posible relación de esta corriente filosófica de la primera mitad del siglo XX, con una de las doctrinas más antiguas y difundidas de la humanidad: El budismo. No es el propósito de la investigación, demostrar que Sartre tuvo algún encuentro con esta doctrina oriental y que esta influyo de manera decisiva sobre su obra, puesto que no hay manera de comprobarlo, por lo menos desde las fuentes sobre su obra y vida que se poseen; pero por otro lado, si se puede evidenciar cierta relación conceptual entre ambas corrientes. El presente trabajo busca demostrar si dicha relación existe, a través de los principios de cada corriente, como estos difieren uno del otro, pero se unen en ciertos puntos.

Tocar este tema es sumamente riesgoso, puesto que, es un problema al que toca llegar con cuidado para no caer en especulaciones, debido al lugar, tiempo y circunstancias en las que nace cada Doctrina,( el Budismo en el siglo V a. de C. en la India. Y el existencialismo, se consolidada en la primera mitad del siglo XX de nuestra era, tras la situación social vivida en Europa, pero es una corriente filosófica que viene desde Kierkegaard en el siglo XIX). Así mismo, el hecho de que sea un punto de vista poco explorado, y los pocos trabajos que se encuentran tocan el tema de una manera superficial, hacen de este camino algo nuevo, por el que toca caminar despacio y sigilosamente.

Esta investigación va dirigida a la comunidad filosófica, teológica y literaria, al tratar de ampliar las interpretaciones y el conocimiento sobre el existencialismo Sartreano a través de sus posibles influencias, o simplemente al poner en comunión con doctrinas de las cuales comparte algunos postulados. Por otro lado, esta investigación hasta ahora es un primer acercamiento a esta posible relación, puesto que quedan muchos conceptos que explorar, así mismo, como estos se pueden aplicar a la obra literaria del francés, cosa que lastimosamente no se alcanzó a abarcar en esta primera entrega. De igual manera, si realmente existió una influencia del Budismo sobre Sartre, queda abierta la investigación hacia una posible respuesta por parte de la historia y la sociología, sobre este fenómeno cultural de oriente en occidente.

Como ya se dijo anteriormente, de este tema poco se ha tratado, de hecho lo único que hasta el momento se ha encontrado en las bases de datos académicas, ha sido un pequeño artículo llamado “Del Budismo al existencialismo de Sartre”[1] de Francisco Giralt Quinto, donde habla sobre la influencia que ejerció el Budismo en los planteamientos existencialistas de Sartre, pero al final, sólo busca demostrar como algunos conceptos, tras ser diferentes se tocan en algunos puntos. Este pequeño artículo, es lo único que se ha hecho hasta la fecha (o por lo menos de lo que hay publicado es lo único que se encuentra) pero no se puede negar el valor que tiene, debido que desde ahí se está planteando todo un problema de investigación, el cual se piensa desarrollar a continuación.

El problema que se plantea en esta investigación, es si es posible que exista una relación conceptual entre existencialismo y budismo. Así, conceptos como el ser en sí, el ser para sí, la negación, la nada, el yo real, el yo ilusorio, el nirvana, entre otros, serán la base para el desarrollo de el problema expuesto.

A continuación, se expondrán los conceptos y planteamientos de cada una de las corrientes, sin llegar a relacionarlas entre si, pues es conveniente entrar a cada doctrina sin presupuestos, acercarse a cada una a la luz de sí misma; así, al conocer los conceptos desde un punto de vista que no este viciado, serán entendidos y aprehendidos de una mejor manera.

En el Ser y la nada (1943) de Jean-Paul Sartre, es el fundamento de lo que va a ser todo el pensamiento existencialista del filósofo, así que todos los conceptos que confieren a la investigación se encuentran en esta fuente:

El ser en sí, simplemente es lo que es, increado, sin relación con el mundo, el ser en sí, es el ser completo, idéntico, sin dualidad, es lo que es, no hay cabida para el no-ser: “El ser en sí no es jamás ni posible ni imposible: Simplemente es. Esto es lo que-en términos antropomórficos- expresará la conciencia al decir que el ser en sí está de más; o sea que ella no puede absolutamente derivarlo de nada; ni de otro ser, ni de un posible ni de una ley necesaria. Increado, sin razón de ser, sin relación alguna con otro ser, el ser en si está de más por toda la eternidad.”[2]

La Nada, para saber como esta adviene al mundo, a través del ser, es necesario conocer los medios por los cuales la nada aparece en el mundo, así mismo la relevancia que esta tiene en el ser y como este se da al mundo.

  • La interrogación: Desde la interrogación, se pone en duda el ser en sí, y cabe la posibilidad de no ser, cada interrogación tiene una posibilidad de una negación, de que haya nada detrás de esa interrogación. Interrogar es estar frente al ser, tener conciencia del ser. :”la posibilidad permanente del no ser, fuera de nosotros y en nosotros, condiciona nuestras interrogaciones sobre el ser. Y el mismo no-ser circunscribirá la respuesta: Lo que el ser será se recortará necesariamente sobre, el fondo de lo que el ser no es, Cualquiera que sea esta respuesta, podrá formularse así: <<EL ser es eso y fuera de eso, nada>>”[3] Así, la interrogación nos da una posibilidad de no ser, de que en la respuesta sea nada, así mismo limita lo que es el ser.

  • La negación: La negación se da desde el momento en que se interroga al ser sobre su ser, en esta medida es una posibilidad del ser, el ser negado. Sin embargo este juicio de negación está condicionado por el no ser, no por la posibilidad que se le de en el pensamiento. Así, para poder dar un juicio negativo, es necesario primero que la nada infeste el ser

Así, al interrogar al ser, existe la posibilidad de una respuesta negativa, que exista una negación; esta relación con el no ser, da la posibilidad para que la nada advenga al mundo. La Nada, viene al mundo a través del ser, en el momento en que este se cuestiona así mismo, sobre su ser. El único modo en que la nada aparece en el mundo es a través del ser que constituye y funda su propia nada. Esta se da por medio del distanciamiento, cuando el ser se pone en frente de su ser, cuando el ser es conciente de su ser (y deja de ser el en sí, ya que el en sí es pura positividad) ya no es ese ser, cambia; el en sí se degrada al ser para sí.

El ser para sí, Es el ser en el cual está en cuestión su ser, donde hay un dualidad por parte del ser, al ponerse al frente a si mismo, el ser ya no es idéntico como el del en sí, donde es lo que es, sino que este se desdobla; al contemplarse, al ser conciente de su ser, deja de ser lo que es, es un ser incompleto.

“El ser de la conciencia en tan que conciencia consiste en existir a distancia de sí como presencia a sí, y esa distancia nula que el ser lleva en su ser es la nada. Luego, para que exista en sí, es menester que la unidad de este ser comporte su propia nada como nihilización de lo idéntico: Pues la nada que se desliza en la creencia es su nada: la nada de la creencia como creencia en sí, como creencia ciega y plena, como <>. EL para sí es el ser que se determina a sí mismo a existir en tanto que no puede coincidir consigo mismo”[4] Así, la distancia, el ser poniéndose al frente de sí, lleva a que la nada advenga al mundo, a través de ese desdoblamiento, de ese ser que deje de ser en sí, para tener que determinarse a sí mismo en el mundo.

La nada, es la que lleva al ser a trascender, este para sí, que es lo que no es, por medio de la nada y de la carencia, a darse cuenta que es lo que no es; busca su fundamente, esa carencia en sí mismo, es decir, en el en , y trata de trascenderse hacia sí mismo, buscando el en sí. Lo que le falta al para sí, es el en sí.

El para sí es el ser al que le falta el en sí, que es lo que no es, y por el viene la nada a el mundo, es conciente de su ser, y su lugar en el mundo, crea sus posibilidades a través de si y el mundo. El para sí, busca trascenderse a sí mismo por medio del deseo, en este caso, el deseo de ser lo que es, de dejar de ser dualidad, para ser idéntico. El posible es aquello que le hace falta al para sí, para poder ser en sí.

Los anteriores son los conceptos más importantes por parte del existencialismo para la presente investigación, ahora, se va a introducir a los conceptos de la doctrina Budista más relevantes para alcanzar el objetivo:

Buda afirma la individualidad, según la doctrina, el hombre es el único que puede salvarse a sí mismo, el camino está en el mismo, es responsable de sí: “Por lo tanto, oh Ananda, sed vosotros vuestro refugio. Apartaos vosotros de todo refugio exterior. Manteneos firmes en la verdad como refugio. No busquéis refugio en ningún otro fuera de vosotros mismos.”[5] Así, la verdad solo se puede encontrar en el mismo hombre, cada uno es responsable de su vida.

Buda también habla sobre el No-yo. Cosa que ha estado en gran discusión hasta nuestros días. Buda, nunca dice cual es el fundamento del hombre su sí, y nunca habla sobre el No yo, sino más bien, habla sobre lo que no es el sí. Buda niega toda la vida ligada a la experiencia, es decir, lo perecedero, el cuerpo y la mente, todo aquello que proviene de la experiencia es sufrimiento. El sí está ligado a lo inmutable, a lo permanente, al devenir. Sin embargo, Buda en su discurso nunca dice lo que es el sí, una actitud totalmente Budista, como si estuviese esperando que el hombre trascienda hacia lo que es el sí, que se le devele fuera de la experiencia del mundo. Pero, esta concepción sobre la negación del yo ha sido muy debatida, las diferentes escuelas plantean cosas totalmente distintas, unas aceptan el alma, otras la niegan totalmente, hasta negar todo posiblemente fundamente del sí. Tras los silencios de Buda, a dicha respuesta, lo que se cree es que es una verdad inefable, a la cual toca intuir y llegar por medio de la meditación. La única realidad es el nirvana, del que se hablara más adelante, el cual se encuentra en cada hombre, y es el deber de cada quien debelarlo y descubrirlo.

Así, el yo ilusorio, es el del mundo empírico, el perteneciente al mundo de la ilusión, de la vida mundana. Es aquel que no sigue la vía media, viviendo una vida que lo único que le producirá es el sufrimiento, y el no despertar, la no liberación.

Por otro lado tenemos El Nirvana, el cual, etimológicamente significa “extinción”, es allí, que después de haber podido negar el yo, el ser individual del mundo de la experiencia, se entra en un estado donde se libera el sufrimiento de este mundo, el hombre deja de reencarnar, se ha liberado de la causa del sufrimiento y dolor, por esto es considerado el bien supremo. Esta liberación se ve relacionada con el estado de felicidad

El nirvana, es un estado de iluminación, donde el hombre que llega a este estado, se convierte en Buda (iluminado), es el estado donde se sale de toda ignorancia, y se intuye la verdad. Cuando Buda, llega a este estado es que conoce la verdad sobre la vida, aquí es cuando pronuncia los discursos más importantes sobre el Budismo, como las 4 nobles verdad, y la vía media. Así, el nirvana es salir del estado de ignorancia, es un encuentro con la verdad, a través de la meditación (el vacío en la mente) que lleva a la eliminación del yo, y por otro lado al ascetismo moral. El nirvana es un dejar que la nada se adentre en el ser, a través de la meditación.

Así, estos conceptos, que a pesar de distar miles de años de su gestación, guardan ciertas relaciones entre sí, no se puede olvidar que son pensamientos que surgen en contextos totalmente diferentes, y que ambos buscan cosas totalmente diferentes, debido a que uno es una corriente filosófica, y el otro además de ser una corriente filosófica, también es una religión.

  • La Negación en relación con el No-yo:

La negación de Sartre, que se da por medio de la interrogación, se empieza a dar un proceso de poner el ser ante el ser. La conciencia, que es conciencia de algo, es conciencia de ser, y a el poner al ser ante la conciencia deja de ser ese ser, para ser otra cosa; hay una distancia por la cual viene la nada al mundo. Pero antes que todo este fenómeno ocurra, de degradación del en sí, al para sí, es importante ver como a través de la interrogación, de la negación que se da por la interrogación, se va conociendo el mundo y el ser, puesto que el no ser que parece por la negación, delimita al ser, el ser es, y la nada que es el no ser, no es. El ser se delimita por medio de lo que no es.

En el Budismo, el no-yo, que es la negación del yo en relación con el mundo sensible, debido a que es una ilusión, y es la fuente de todo sufrimiento, busca por medio de la negación del yo como individuo, el nirvana, poder obtener la iluminación. La negación, en ambos casos es necesaria para saber lo que es el ser; por un lado en el existencialismo, en la negación se divisa lo que es el ser, a parir de lo que no es; y en el budismo, Buda dice lo que el sí no es, pero jamás menciona cual es su fundamento, de lo cual derivan un sin número de especulaciones. Así mismo, la negación es una forma de trascender en ambas corrientes. En el existencialismo la negación busca poder trascender a sí mismo y al mundo; mientras que en el Budismo se busca, por medio de la negación del yo, trascender hacia la iluminación, a la verdad, por medio del nirvana. El que niega el mundo y su yo individual, puede llegar al estado supremo.

De este modo, las dos negaciones son formas de llegar a un conocimiento determinado, la negación es necesaria para conocer lo que es, por medio de lo que no es.

  • El ser para sí en relación al nirvana, a la iluminación

El ser en sí, para Sartre, es aquel ser que es increado, que simplemente es, no es dual, es identidad, es plenitud de ser. Pero este al ser puesto ante la conciencia, a ser la conciencia, conciencia de ser, deja de ser ese ser, para estar el en sí, frente al ser, es decir, ya no es identidad, es dualidad, al ser conciencia de ser, ya no es ser en plenitud, ha cambiado a ser para sí. El ser para sí, al ser en distancia del ser, nihiliza el en sí, siendo lo ser que no es. Así, al a ver esta distancia entre el ser, y la conciencia de ser ese ser, que ya no es ese ser, la nada adviene al mundo. Y es, por medio de la nada, que el ser puede trascender hacia a el mundo, puesto que el ser es en el mundo, y hacia su propio ser, busca ser el ser del en sí, su fundamento. El ser del para sí, es aquel por el cual la nada viene al mundo, y esta nada es la que hace ver a el ser lo que es, un ser que es lo que no es. Es por esto que el para sí, por medio de la carencia, y a través del deseo busca ser ese ser que no es siendo lo que no es, así, trasciende hacia el mundo, y hacia sí mismo. El para sí, es un ser conciente de su libertad, y de la responsabilidad de la misma.

En el nirvana como significa su palabra hay extinción, hay extinción de la causa del sufrimiento, el hombre ha captado la verdad a través del ascetismo moral, y la meditación. La negación del yo individual, como aquel que por medio de la experiencia sensible obtiene de si todo el sufrimiento y dolor, hace que se puede llegar al estado de liberación, donde se uno con el absoluto, con el vacío. Es, a través de la meditación que se permite que la nada invada al ser, puesto que, si se tiene en cuenta el objetivo de la meditación es poder intuir la liberación, la verdad; y para poder llegar a ella, toca pensar en nada, el pensamiento tiene que estar en blanco, la nada tiene que venir hacia el hombre, así este descubrirá la verdad.

Así, en ambos caso, el ser para sí, como en el nirvana, la nada adviene a través de los dos, en el caso del ser para sí, es necesario que la nada advenga a través del para sí, para que este pueda trascender al mundo y hacia sí mismo; en el budismo, la nada viene e invade al hombre para que este pueda intuir la verdad, ya estando en el nirvana, el hombre se hará uno solo con el absoluto, es decir, que disolverá en la nada, liberándose de la cusa del sufrimiento.

Los caminos de iluminación, de conocimiento de la verdad se dan de maneras diferentes. En el budismo la anulación del yo es fundamental, el hombre tiene que eliminar su yo que desea, tiene que ir por la vía media. Esto es totalmente diferente del existencialismo, ya que es a través de la carencia, y el deseo, que el ser puede llegar a trascenderse hacia lo que es, puesto que el para sí, es un ser que es lo que no es. El deseo hace que el ser de cuenta del mundo, de su carencia, busca el ser en sí.

El momento de la muerte, para el hombre que ha alcanzado el nirvana, suprime su Samsara, es decir, las reencarnaciones generadas por el karma. Así, se ha liberado del sufrimiento del hombre; al morir, el hombre es une al absoluto, y este absoluto es vacío, es nada. Mientras que en el existencialismo, el hombre cuando muere, vuelve a la plenitud de ser, es en sí, es inmutable, no esta frente a sí, sino en sí. Sin embargo, este concepto de la muerte en el existencialismo Sartreano, no se ha alcanzado a esclarecer del todo, pero, con lo poco se ha logrado divisar, es posible ver una diferencia con el Budismo, puesto que el ser no se disuelve en la nada, sino que se haya pleno al ser en sí, inmutable por la inexistencia de temporalidad.

  • Libertad y responsabilidad y la afirmación de la individualidad

“El hombre, al estar condenado a ser libre lleva sobre sus hombros todo el peso del mundo; es responsable del mundo y de sí mismo en tanto que manera de ser. Tomamos la palabra <> en su sentido trivial de <>. En este sentido, la responsabilidad del para sí es abrumadora, pues aquel por quien ocurre que haya un mundo; y, puesto que es también que es aquel que se hace ser, el para sí, cualquiera que fuere la situación en que se encuentra, debe asumirla enteramente con su coeficiente de adversidad propio, así sea insostenible; debe asumirla enteramente con la orgullo conciencia de ser autor de ella, pues los que mayores inconvenientes o las peores amenazas que pueden afectar a mi persona sólo tienen sentido en virtud de mi proyecto y aparecen sobre el fondo del compromiso que soy”[6].

El ser del para sí, está arrojado en el mundo, no como un ente pasivo, sino todo lo contrario, es totalmente responsable de él y del mundo. Al conferírsele libertad al ser del para sí, este tiene todo la responsabilidad sobre todo aquello que le pase; todos estos planteamientos a la luz de una óptica marxista, que buscan que el hombre sea artífice de su propia realidad, que se sienta comprometido y responsable ante el mundo en el que se encuentra.

En el Budismo, como se mostró en páginas anteriores, reafirma la individualidad, en el sentido de que el hombre es el único responsable de su salvación, de poder para con la vida de sufrimiento a partir de la búsqueda de la verdad en sí mismo. El budismo confiere la verdad a cada hombre, cada uno está en la capacidad de intuirla en su interior, por medio de la meditación.

Estos dos pensamientos se ven relacionados entre sí, no sólo por que cada ser es responsable totalmente de su vida y mundo. Sino que estas corrientes de pensamiento se presentan de esta manera, debido a la ausencia de Dios. Como sabemos, el existencialismo de Sartre se da en unas circunstancias particulares, donde se propone que el ser humano tiene que estar comprometido con el mundo, tiene que ser el creador de su propia realidad, por eso es “existencialista”, porque es conciente de su ser, no como un ente aparte, sino como su ser en el mundo, existente en un contexto y lugar determinado. A parte de esto, al ser marxista, niega la existencia de Dios, y al no tener a quien dar la responsabilidad sobre las cosas que ocurren en el mundo, todo recae sobre el hombre. Lo mismo sucede en el Budismo, donde al no tener un Dios, la salvación no depende de él, cosa contraria que sucede con el catolicismo, por ejemplo, donde la vía y la salvación es Dios. En la doctrina oriental, la verdad se encuentra en el hombre, es el único responsable de su salvación, de la eliminación del sufrimiento.

Es de este modo, como se pudo ver que entre ambas corrientes filosóficas existe una gran relación conceptual. No se podría saber si realmente Sartre tuvo alguna influencia directa del budismo en la realización de su obra filosófica, o por lo menos en este momento es imposible afirmarlo; sin embargo, es innegable la similitud del existencialismo con el budismo, sin dejar de lado sus grandes discrepancias. A través de este trabajo se pudo ver como conceptos como la nada, el ser para sí, la afirmación del ser, entre otros, comparten una gran relación, a pesar de que en muchos momentos cada concepto se desvía, según el fin de la doctrina en el que se encuentra. Uno de los conceptos más relevantes en ambas corrientes, sin dudar alguna es la nada, en ambos casos se da para llegar a un fin determinado, ya sea conocer la verdad y la liberación, como en el budismo, o trascender hacia a el mundo y hacía sí.

Este, es apenas un primer acercamiento a dicha relación, quedan muchos conceptos todavía por analizar a la luz de este problema filosófico. Además es importante poder analizar este tema a través de nuevas disciplinas, como la historia, y de la influencia entre oriente y occidente. Es mucho lo que aún queda por decir, se espera que este trabajo no se quede en este punto, sino que en un futuro, pueda ser concluido; y así mismo, que sea un aporte para el conocimiento.

BIBLIOGRAFÍA

  • Arvon, Henri, El budismo. Buenos Aires: Iriarte, 1961
  • Dumolin, Heinrich, Encuentro con el budismo. Barcelona: Editorial Herder, 1982

· Giralt Quinto, Francisco. Del budismo al existencialismo de Sartre. New York: Noticias literarias. 26. 07. 2007-20.11.2007. http://www.noticiasliterarias.com/articulos_literarios/articulos%20literarios%2033.htm

  • Quiles, Ismael, SJ. Filosofía Budista. Buenos Aires: Ediciones Troquel, 1968
  • Sartre, Jean-Paul, El ser y la nada. Barcelona: Ediciones Altaza, 1993


[1] Giralt Quinto, Francisco. Del budismo al existencialismo de Sartre. New York: Noticias literarias. 26. 07. 2007-20.11.2007. http://www.noticiasliterarias.com/articulos_literarios/articulos%20literarios%2033.htm

[2] Sartre, Jean-Paul, El ser y la nada. Barcelona: Ediciones Altaza, 1993. página 36.

[3] Ibíd., Página 42

[4] Ibíd.., página 112.

[5] Quiles, Ismael, SJ. Filosofía Budista. Buenos Aires: Ediciones Troquel, 1968. página 75.

[6] Sartre, Jean-Paul, El ser y la nada. Barcelona: Ediciones Altaza, 1993. página 576

domingo, 30 de septiembre de 2007

Primer esbozo del marco teórico


MARCO TEÓRICO

En la presente investigación se estudiará la relación entre la filosofía existencial y el budismo oriental. Dicha relación se evidencia en el filósofo francés Jean-Paul Sartre donde algunos conceptos guardan semejanza con el budismo.

Muy poco se ha hablado e investigado sobre dicha relación conceptual, en las bases de datos lo único que se encuentra acerca del tema es un artículo en la página http://www.noticiasliterarias.com, escrito por Francisco Giralt Quinto llamado “Del budismo al existencialismo de Sartre”. En éste artículo se habla sobre la posible influencia del budismo en Sartre, como algunos conceptos se ven relacionados como el ateismo, el hombre despierto y la nada en relación con el nirvana. Sin embargo, este trabajo no es profundo y deja abiertas muchas posibilidades. Giralt al final sólo pretende demostrar que a pesar de que las ideas distan una de otra, guardan alguna relación.

Para el desarrollo de esta investigación, es necesario conocer que cronológicamente la obra existencial de Sartre empieza en “la nausea”, allí es donde se empezaran a plantear los grandes conceptos de dicha corriente filosófica, que serán ampliados en forma de discurso filosófico en la obra “El ser y la nada”. Los conceptos más importantes para que sea posible esta investigación, son:

  • La conciencia: Sartre habla de la conciencia, pero no como un saber sobre ella misma, sino la pone como un valor universal, es allí donde el fenómeno se presenta, puesto que la conciencia es siempre impulsada hacía afuera para ser conciente del ser de la cosa que no es ella misma.

  • El ser en sí: Para Sartre, después de hablar sobre como se da el ser, la diferencia con el fenómeno, la forma en que es percibido, dice que el ser es en sí: “El ser en sí no es jamás ni posible ni imposible: Simplemente es. Esto es lo que-en términos antropomórficos- expresará la conciencia al decir que el ser en sí está de más; o sea que ella no puede absolutamente derivarlo de nada; ni de otro ser, ni de un posible ni de una ley necesaria. Increado, sin razón de ser, sin relación alguna con otro ser, el ser en si está de más por toda la eternidad.”[1]

  • La Nada: Es la forma del no-ser. El ser es y la nada no es. A través de la interrogación, de lo negativo, adviene al mundo. Así, la nada se da a través del ser, y por medio de ésta, de la negación del no-ser, se limita el ser.

  • El ser para sí: A diferencia del ser en sí, que existe por si mismo, que no es presenta ninguna dualidad; el ser para sí, es el que pone el ser en la conciencia. Aleja el ser para que exista la dualidad, la negación, el ser para sí existe a distancia de sí; y esa distancia es la nada, por la cual se pasa del ser en sí a el para sí.

Así mismo, conceptos como la trascendencia y la libertad, serán de gran importancia en el desarrollo de la investigación.

Por otro lado, los conceptos del Budismo más relevantes para la investigación son los siguientes:

  • Las cuatro santas verdades: Buda, en las cuatro santas verdades habla sobre como la existencia es dolor, el origen de éste, y de cómo eliminarlo. Así, Buda dice que todo lo que constituye el Yo es sufrimiento. El origen del dolor se encuentra en la sed de existencia, en lo fugaz de la vida y en los placeres. Y la forma de eliminar el dolor es suprimiendo la voluntad y el deseo, es decir, el Yo, por medio de la meditación para que se de la liberación.
  • El Karma: Es la trascendencia de la acción que se realizó, en las vidas futuras. “karma es la acción en la medida en que ésta ha tenido un alcance transcendental. El Karma se parece, por decirlo así, a una piedra que se lanza al agua y cuyo efecto se hace sentir sobre todo por los círculos concéntricos que rodean al punto de caída”[2]
  • El Nirvana: Es el estado de libertad, donde el hombre queda libre de sufrimiento, es decir, deja de reencarnar, por esto su significado quiere decir “extinción”. Para llegar a este estado es necesario haber vivido cierto número de vidas, así como haber negado el yo a través de la meditación.

Todos estos conceptos son de gran importancia para el desarrollo del análisis de similitud y diferencia de ambas doctrinas, ya que como se dijo anteriormente, la investigación busca comprobar que a pesar de lo diferente de ambas doctrinas, guardan cierta relación conceptual. Del mismo modo, son necesarios para realizar una lectura de “la nausea” de Jean-Paul Sartre, ya que en esta se desarrollan los conceptos planteados en la obra filosófica de Sartre.

Si bien, la fuente principal para esta investigación es “La nausea” de Sartre, para poder llevar acabo esta investigación, que busca hacer una nueva lectura de esta obra; es necesario, en primera instancia, exponer ambas doctrina filosóficas, para que, después de tener claro la relación existente, se pueda entrar a hacer la lectura de la obra literaria, donde esta relación se evidencia.



[1] Sartre, Jean-Paul, El ser y la nada. Barcelona: Ediciones Altaza, 1993. página 36.

[2] Arvon, Henri, El budismo. Buenos Aires: Iriarte, 1961. página 17.

TABLA DE CONTENIDO

  1. Existencialismo

1.1 ¿Qué es el existencialismo?

1.2 Jean Paul Sartre

1.3 Existencialismo sartreano

1.3.1 El ser en sí

1.3.2 El ser para sí

1.3.3 La nada

1.3.4 La negación

  1. Relaciones conceptuales entre budismo y existencialismo

2.1 ¿Qué es el budismo?

2.1.1 Las 4 nobles verdades

2.1.2 Meditación budista

2.1.3 Iluminación, el nirvana

2.1.4 Budismo y occidente

2.2 Relación budismo y existencialismo

2.2.1 Ateismo en el budismo y el existencialismo

2.2.2 La negación como modo de llegar a la verdad

2.2.3 El ser para sí y el ser iluminado

2.2.4 La nada y el nirvana como fin último

  1. Una lectura de la obra “La náusea” a través de la relación conceptual entre budismo y existencialismo.

domingo, 16 de septiembre de 2007

Propuesta de investigación



TEMA:


El existencialismo en el filósofo francés Jean-Paul Sartre.


PROBLEMA:

Relación conceptual entre budismo y existencialismo sartriano


PREG
UNTA:

¿Cómo se evidencia la relación entre budismo y existencialismo en la obra literaria “La náusea” de Jean-Paul Sartre?

OBJETIVO GENERAL

Demostrar que existe una relación conceptual entre budismo y existencialismo sartreano, y que es posible hacer una lectura de “La náusea” a través de ésta relación.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS

  • Analizar, y relacionar diferentes conceptos del existencialismo y el budismo, buscando sus similitudes y discrepancias.
  • Describir la influencia de oriente en occidente, desde el contexto de Sartre
  • Demostrar la relación que tiene el fenómeno de la náusea, con la meditación Budista.

FUENTES PRIMARIAS

Sartre, Jean-Paul. La náusea. Bueno Aires: Editorial Losada, 1977.

FUENTES SECUNDARIAS

  • Arvon, Henri, El budismo. Buenos Aires: Iriarte, 1961